Valle de la Luna

Uno de los paisajes más bonitos de San Juan es que nos brinda el Valle de la Luna, un paisaje desértico lleno de formaciones arcillosas con mucha historia y una gran valor en su geología. El Parque Provincial Ischgualasto, conocido por todos como el Valle de la Luna tiene una superficie de 60 mil hectáreas, se encuentra a unos 300 kilómetros de la ciudad de San Juan.

El lugar, en el período Triásico de la Era Mesozoica, era un gran lago rodeado de vegetación y con una gran variedad de especies. En la actualidad solo se puede ver un inmenso desierto. Hace cerca de 60 millones de años que las rocas de las Cordilleras de los Andes se ‘apretaron’ contra las Sierras Pampeanas dejándolas al descubierto y exponiéndolas a los diferentes agentes erosivos.

Algunas de las formaciones más atrayentes se denominan: “El Gusano”, “La Esfinge”, “El Submarino”, “El Hongo” destacándose la “Cancha de Bochas” una superficie plana sobre la que se encuentran esferas circulares perfectamente pulidas.

En el Valle Pintado se pueden ver como se destacan sutiles lomadas en diferentes colores grisáceos, violáceos y ocres. En este lugar se encontraron restos fósiles muy importantes. El Paisaje Lunar es uno de los sitios más atrayentes por el turismo, su imagen es muy impactante, quienes tengan la fortuna de verlo tendrán la sensación de estar sobre la superficie lunar.

En el Valle de la Luna se destacan las geoformas, permitiendo que se puedan ver diferentes clases de rocas, formaciones de lo más extrañas. El Cerro Morado se ha formado por grandes capas de basaltos, cuenta con una altura de 1400 metros sobre el nivel del mal. Según la interpretación popular visto desde el oeste se podría ver a un indio acostado con la cabeza dirigida hacia el norte.

Vía | Artentina Turismo
Foto | Flickr – Taringa

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