Topazz, la elegancia de un hotel en el centro de Viena

Escrito por: slopez    21 septiembre 2013    3 minutos

A pesar de ser una ciudad con una calidad histórica y cultural muy amplia, Viena también presume de contar con lugares que asombran a la vista por su lujo y elegancia. Este es el caso de uno de los hoteles más modernos (y recién nacidos) de todo el país. Espero que les guste recorrer el espacio del Hotel Topazz.

Este hotel fue inaugurado en el año 2012, con un diseño exterior e interior de gran lujo, que se entremezcla con la riqueza del pasado histórico de la ciudad. Se encuentra ubicado en la calle Lichtensteg, en el famoso Distrito 1, muy cercano a lugares tan interesantes como la Catedral de San Esteban y las calles comerciales de Kärntner, Strasse, Graben y Kohlmart.

Cuando nos situamos delante de la fachada del hotel, un enorme cilindro de gas, lleno de grandes piedras ovaladas se levanta ante nosotros, mostrándonos una especie de imagen de la Viena futurista. Una visión del primer hotel de lujo de construcción verde (preservación del medio ambiente y ahorro de energía) en la capital austriaca.

Ya dentro del hotel, podemos admirar todo el estilo desarrollado por importantes artistas austriacos, alternando, como hemos dicho anteriormente, con el clasicismo de la Viena de los siglos XIX y XX. Si pasamos al salón del hotel, se aprecia la recreación del ambiente de una casa vienesa de hace un siglo. En este lugar, los huéspedes pueden relajarse de lo lindo junto a acogedores sofás, fauteuils (silla de la Francia del XVIII) y bebidas de todo tipo.

En nuestra estancia en el hotel, podremos elegir entre las treinta y dos habitaciones que nos ofrece, a lo largo de sus nueve plantas. Las habitaciones están elegantemente decoradas con muebles hechos a medida, preciosas lámparas y exuberantes cortinas, entre otros elementos. En el ático, encontramos una suite con terraza, desde la que tendremos una espectaculares vistas de la capital de Austria, a la vez que podrá ser usado para cualquier tipo de reunión o evento.

A la hora del desayuno, pasaremos al salón del hotel, donde podremos disfrutar de productos y platos exquisitos como cereales y mermeladas, Liptauer (crema de queso), Granola (con nueces y copos de avena, mezclados con miel), o un huevo pasado por agua, acompañado de lentejas y tocino. No me digan que no se les hace la boca agua.

Justo al otro lado de la calle, encontramos un encantador lugar para nuestro almuerzo, cena o, simplemente, tomar una copa. Hablamos del Café Bar Bloom, Con una decoración interior impresionante, la hospitalidad típica de Viena y la cocina y bebidas tradicionales quedan patentes en todo momento en este elegante establecimiento.

La modernidad y la elegancia convertidas en un majestuoso hotel para todos los públicos. Un lugar, en el mismo centro de Viena, desde donde podremos partir para nuestra visita a la capital de Austria. Sin duda, un edificio que merece la pena visitar para comprobar, in situ, cuales son las tendencias más modernas y futuras de la arquitectura a nivel de hoteles.

Vía | hoteltopazz
Foto | flickr-HerrWick

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