Qué ver en Zadar, en la Costa Dálmata croata

Zadar, en la Costa Dálmata, es una de las ciudades más importantes de Croacia en lo que a nivel turístico se refiere, junto a Dubrovnik. Con un importante patrimonio cultural pese a ser fuertemente bombardeada durante la Segunda Guerra Mundial, la antigua Zara es un lugar para dedicarle un día entero, caminado por su casco histórico todo peatonal. Así que cruza el puente que lleva hasta la península en la que se extiende la ciudad vieja y empieza a conocer uno de los destinos señalados como más importantes en el Mediterráneo.

Los restos arqueológicos

La historia de Zara se remonta a casi 900 años antes de Cristo, así que tiene restos arqueológicos de gran valor. Para conocerla, lo ideal es ir al Museo Arqueológico (probablemente el museo más interesante de la ciudad) aunque también hay que acercarse a ver los restos del antiguo Foro Romano, del siglo III antes de Cristo.

Lo que es la ciudad vieja estuvo completamente amurallada y parte de esas construcciones defensivas se conservan, entre ellas seis puertas de entrada a la ciudad. La más famosa es la Puerta de Zara, del siglo XVI, decorada con el León de San Marcos, símbolo de Venecia, otro pueblo que en su momento ocupó esta población.

Las iglesias de la ciudad

El símbolo de la ciudad de Zadar es una iglesia, la Iglesia de San Donato. Su origen se remonta al siglo IX y es fácilmente reconocible por su forma circular, lo que le hace tener una acústica estupenda para que en ella se celebren conciertos. Está justo junto al Foro Romano, construida con muchos restos de este espacio arqueológico.

Muy cerca se encuentra el otro templo importante, la Catedral, dedicada a Santa Anastasia, que presume de ser uno de los templos más grandes del país croata. Otras iglesias que han sobrevivido y que merecen la pena asomarse a ellas son las de San Crisógono, de Santa María (con un museo de arte sacro) y San Simeón (con las supuestas reliquias de este santo).

El Organo del Mar y el Saludo al Sol

El mar ha sido muy importante en la historia de Zadar y lo sigue siendo, así que el paseo marítimo es uno de los lugares más concurridos por los turistas. Lo ideal es dejar la visita a esta zona para última hora, pues se puede disfrutar de unas fascinantes puestas de sol (Hitchcok decía que eran las más bonitas del mundo).

En este paseo marítimo encontramos dos monumentos creados por Nikola Basic. Uno es el Órgano del Mar, unas escaleras llenas de tubos y cavidades entre las que se cuelan las olas de mar y producen una música relajante. El otro es el Saludo al Sol, un círculo de placas de vidrio que representan al Sistema Solar y que por la noche se iluminan.

Foto | Flickr – Nick Savchenko

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