Semana Santa en Castilla y León (I)

Solemnidad, sobriedad y silencio pueden ser los adjetivos que definen las celebraciones de la Semana Santa en Castilla y León. De arraigada tradición, esta fiesta no se concibe como un espectáculo y se procura mantener la solemnidad. Se nota en los últimos años una mayor afluencia de turistas quienes, probablemente influidos por otras celebraciones más festivas, aplauden y ovacionan a los pasos, algo que contrasta fuertemente con el respetuoso silencio que mantienen los cofrades y los espectadores locales.

Manteniendo cada una su idiosincrasia, podemos sin embargo hablar de los rasgos comunes de la Semana Santa en Castilla y León. Son días para vivir la historia, cultura y devoción de esta tierra, entre iglesias románicas y góticas y, tallas de incalculable belleza y valor artístico. Son numerosas las declaraciones de estas celebraciones como Fiestas de Interés Regional y Nacional, destacando entre ellas las ocho nominadas como Fiestas de Interés Internacional:

• Ávila nos invita a vivir la Semana Santa en el marco único de su ciudad amurallada, Patrimonio de la Humanidad. El Martes la Procesión del Miserere rompe el silencio de la noche tan solo con este canto. El Miércoles Santo, sale el Cristo de las Batallas, un pequeño busto que acompañó hace siglos a los Reyes Católicos. El Jueves, la procesión de los Pasos congrega al mayor número de cofrades y visitantes por su belleza. El Viernes Santo se celebra el Vía Crucis que sigue la muralla y en el que destaca el Cristo de los Ajusticiados. Se cierra la Semana Santa abulense con una merienda popular en la Ermita del Resucitado el Domingo de Resurrección.
• León cuenta con dieciséis cofradías, la más antigua de 1572, y más de dieciséis mil papones (cofrades). En total son treinta procesiones con 65 pasos que en su gran mayoría son pujados a hombros. Si hay que destacar alguna entre ellas, la que congrega a un mayor número de público es la Procesión de los Pasos del Viernes Santo. Comienza la noche anterior con La Ronda, en la que se invita a los hermanos cofrades a prepararse para la procesión que empieza a las siete y media de la mañana. Por toda la ciudad se escuchan la esquila, el clarín y el tambor y, el grito de los cofrades: «Levantaos hermanitos de Jesús, que ya es hora». Trece pasos procesionan entonces por la ciudad de León, confluyendo cerca del mediodía en la Plaza Mayor, donde se produce el sobrecogedor Encuentro entre la Virgen Dolorosa y San Juan.
  Entre tantas procesiones y muestras artísticas, no olvides visitar la Pulchra leonina, la Catedral de León, sin duda una de las más bellas del mundo.

En un próximo artículo continuamos con la Semana Santa en Castilla y León, una magnífica opción para estos días. Por ejemplo, reserva hoteles en Valladolid para tu fin de semana o para la Semana Santa completa.

Foto | Flickr-Oscar Robres
Más información | Turismo Castilla y León

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