Oaxaca y su particular gastronomía
La gastronomía oaxaqueña es muy variada, en ella se mantienen vivas las tradiciones de sus habitantes. La misma se encuentra presente en todas las festividades. Dentro de su gastronomía se encuentran varios elementos que han sobrevivido de la cocina prehistórica, además de los procedimientos para hacerla.
En este tipo de cocina se le da mayor interés a los productos locales que se combinan de tal manera para que los platos tengan una equilibrada combinación entre aromas, colores y sabores. Muchos de los colores quedan representados en los nombres de los platos, por ejemplo los moles colorados, moles amarillos o moles verdes.
En la ciudad se realiza una gran variedad de quesos que muchos los consideran como los mejores del planeta. Sus chiles locales tienen un gusto muy particular, encontramos chihuacales de color negro y rojo. Un trago muy particular son los gusanos acompañados con una copa de mezcal. En Oaxaca la gastronomía se combina con la historia desde hace miles de años, un claro ejemplo de ello es la Noche de los Rábanos y la gastronomía.
Actualmente la ciudad es el tercer productor de café, el segundo de la piña, además de buenos cultivadores de limón, ají, caña de azúcar, mango y mamey. En diferentes zonas se dedican a comer parte de lo que pescan, o sea, especies como el tiburón de Puerto Antel y el atún.
Existen bocadillos que vale la pena probar, algunos de ellos son:
- Chapulines doraditos
- Empanadas de amarillo
- Empanadas de mole
- Salsita de gusano de magney
- Totopos
- Quesillo
- Chorizos fritos
- Memela con asiento
Vía | Revista Buen Viaje
Foto | Flickr – Durtr Mund
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