La gastronomía alemana: Estado de Turingia

Ya queda menos para que completemos nuestro recorrido por la cultura gastronómica de los diferentes estados alemanes. Hoy vamos a detenernos en el estado de Turingia, famoso por sus bosques, donde podremos saborear, en sus localidades, diferentes platos típicos de la zona.

Si hay un producto que representa muy claramente a este estado es la carne. De hecho, Turingia se considera el estado de Alemania donde más salchichas se consumen, que se pueden encontrar tanto en los restaurantes como en cualquier mercado callejero de sus distintas ciudades.

Ya que hablamos de salchichas, si pasamos por localidades como Erfurt, Jena, Weimar, Gera o Eisenach, no podemos dejar pasar la oportunidad de probar las Thüringer Rostbratwurst, las salchichas más populares del estado, con un fuerte sabor a especiar y un grosor de entre quince y veinte centímetros.

Otro producto muy tradicional en la región es el queso. Entre las distintas especialices que poseen, cabe destacar el Altenburger Ziegenkäse. Esta modalidad de queso está elaborada con leche de cabra y vaca, con un sabor bastante fuerte. Este queso, además, posee denominación de origen protegida a nivel europeo.

Entre los platos típicos que podemos degustar tenemos el Thüringer Klösse, una derivación de las famosas bolas de patata alemanas (Klosse), elaborados con 2/3 de patata cocida y 1/3 de patata sin cocer. Suele incluir en su interior un picatoste frito en grasa animal y es buen acompañante de los platos de carne.

Otro plato a destacar es la Zwiebelkuchen, una torta de cebolla que incluye pequeñas tiras de bacon. Aparece en forma de pastel, estando muy relacionado con las fiestas del vino que se celebran en la región, y muy típico de saborear en los meses de Septiembre y Octubre. Un buen vino blanco es su mejor pareja.

Para los adictos a la carne, el tradicional Mutzbraten de Schmölln (tradicional en la ciudad de Schmölln) es su plato a pedir. Este asado procede de la carne de cerdo y, más concretamente, de la zona del omóplato de dicho animal. Se elabora con pimienta negra y se sazona con hierba mejorana.

Después de tan suculentos manjares, debemos seguir probando las delicias de la zona. Para ello, un buen postre es el Schmandkuchen. Este postre es un pastel de crema agria, que se elabora con margarina, crema agria, vainilla, harina y azúcar, quedando un delicioso pastel a nuestra vista.

Y, como siempre y sin ánimo de ser repetitivo, la bebida es algo que debe acompañar a una buena comida. Para no complicarnos la bebida, una cerveza típica de la zona es lo mejor. En este caso, la más afamada es la cerveza Köstritzer Schwarzbier, con más de cuatrocientos cincuenta años de antigüedad.

Vía | wikipedia
Foto | flickr-Thom Sanders

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