Los cinco museos más raros de Alemania que te sorprenderán

Los museos quizá no sean el principal argumento para visitar un destino turístico, pero sí que son una buena opción para visitar durante la estancia en ese lugar que hemos elegido para disfrutar de unas vacaciones o una escapada. Alemania es uno de los países europeo preferidos para viajar desde España, bien sea para unas vacaciones largas o una pequeña escapada de pocos días. En este país encontramos varios museos curiosos, así que te vamos a mostrar los XXX museos más raros de Alemania, por si quieres visitarlos durante tu viaje al país.

Museo del Perro Salchicha

Aunque el chiste parece servido por el tipo de perro elegido, la verdad es que el Museo de los Perros Salchicha ha tenido un éxito que ha sorprendido a Josef Küblbeck y Oliver Storz, los impulsores de este espacio expositivo. Se trata de un museo ubicado en Passau que está dedicado a este tipo de perros de patas cortas y cuerpo alargado. Contiene más de 4.500 piezas que representan a este animal y recibe muchas visitas de aficionados a este tipo de perros, que pueden ver figuras y muchos datos referentes a las razas que tienen estas características.

Museo del Saco

Los sacos son un elemento muy común. Se utiliza para almacenar productos y además, sirve como envoltorio para enviar por correo o transporte variado cualquier cosa. Así que, ¿por qué no un museo consagrado a este práctico elemento? En el Museo Alemán de Sacos, en Nieheim, se pueden ver 7.000 sacos de lo más variado. Desde sacos de grano hasta otros sacos, diferentes y con usos muy variados. Son elementos prácticos pero que también nos sorprenden con formas y utilidades que no podemos imaginar.

Museo del Arte Sepulcral

La muerte y todo lo que está alrededor de ella es importante para muchas culturas. El Museo del Arte Sepulcral se encuentra en Kassel y en sus colecciones se pueden ver sepulcros, ataudes decorados de varias maneras, coches fúnebres y muchas más cosas que tienen que ver con la cultura funeraria y cómo se ha tratado a lo largo de la historia.

Museo del Sacacorchos

Otro elemento muy común en nuestra casa y que podemos echar de menos en el momento más inoportuno. Los sacacorchos son una herramienta muy útil y en el Museo del Sacacorchos, en Vogtsburg, cerca de la Selva Negra, se puede ver la colección que inició Bernhard Maurer en 1995. Actualemente, esta colección es de más de 1.000 unidades y comprende desde los sacacorchos más comunes y normales hasta auténticas filigranas pensadas para que podamos disfrutar de nuestro vino preferido con estilo y clase.

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Museo de la Bacinica

Los orinales han sido muy importantes en la vida familiar hasta hace muy poco. En la ciudad de Wasbüttel, en Baja Sajonia, se encuentra el Museo de la Bacinica, que reúne unos 600 recipientes de este tipo. El más antiguo data del año 1875. Este museo se parece al que hay en Ciudad Rodrigo y que rinde homenaje a un elemento que era muy común en todos los hogares.

Estos museos son diferentes, originales y permiten descubrir particularidades de objetos y elementos que son muy comunes y los disfrutamos de manera totalmente normalizada, pero que esconden curiosidades y cosas que pueden hacer que la visita a Alemania sea más entretenida, cultural y divertida.

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