Siete hoteles para disfrutar de la naturaleza más salvaje

Los aficionados a la aventura siempre quieren disfrutar de un extra en sus vacaciones y viajes. Algo que suponga un reto o que les permita experimentar algo que vaya un poquito más allá del dormir en una confortable habitación de hotel. Sentirse parte del entorno y vivir nada más despertarse la magia de la naturaleza. Por eso, Trivago ha realizado una lista con los siete hoteles más especiales para los amantes de la naturaleza. Y estos son los elegidos.

Bangkok Tree House (Tailandia)

Este hotel está ubicado en Thonburi, un pulmón verde al que sólo se puede acceder andando, en bici o en lancha. Entre sus particularidades están la casa árbol familiar, que está construida con bambú, una cama que flota a la deriva por el río Chao Phraya o una habitación de siete metros de altura, en el que las paredes son las palmeras y el techo, el cielo abierto. En algunas zonas no hay electricidad y por supuesto, el Wifi brilla por su ausencia en la mayor parte del hotel. Y los que puedan pasar sin el móvil, reciben un descuento en el precio final.

Escondido (México)

Este hotel hace honor a su nombre. Se encuentra en el estado de Oaxaca, entre un bosque de cáctus. Cuenta con dieciséis palapas de 35 metros cuadrados, decorados con colores vivos, al modo tradicional. Cada una de ellas cuenta con una alberca particular que coge su agua del Pacífico. En el entorno, se puede practicar el surf, el submarinismo y otras actividades propias de este lugar y disfrutar de su comida tradicional.

Kagga Kamma (Sudáfrica)

En la reserva de Kagga Kamma nos podemos alojar en cuevas excavadas en las paredes de piedra, en mitad del campo, con los aullidos de las hienas como banda sonora nocturna o, si no se quiere experimentar la naturaleza de forma tan salvaje, en las cabañas que se ofrecen como alternativa. La naturaleza casi virgen de Sudáfrica oculta joyas naturales, pero también pinturas rupestres que tienen más de 6.000 años de antigüedad.

Ladera Resort (Santa Lucía)

El Ladera Resort se encuentra en la isla de origen volcánico de Santa Lucía y cuenta con 35 cabañas sin paredes que se integran con la naturaleza frondosa que cubre la isla. Las montañas Pitons, consideradas Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, sirven de marco para realizar una gran cantidad de actividades en el mar Caribe.

Jeeva Beloam Beach Camp (Indonesia)

Entre dos playas se abre una pequeña cala y en ella, este hotel que cuenta con once cabañas construidas con maderas recicladas, bambú y que se decoran con elementos que surgen de la economía tradicional de la zona. Las cabañas están aisladas unas de otras entre las dunas y ni siquiera cuentan con televisión o Wi-fi. Es un lugar donde dejarse llevar por los sonidos de la naturaleza y disfrutar de la tranquilidad que se respira allí.

Belmond Safaris (Botsuana)

En Botsuana encontramos este establecimiento, que se mimetiza con el entorno salvaje de esta zona donde la presencia de humanos pasa casi desapercibida. Los refugios donde se pasa la noche se camufla con la sabana y se puede respirar la tranquilidad que ofrece la naturaleza africana. En este establecimiento se puede comer y cenar al aire libre, después de hacer varias visitas guiadas por la zona y navegar con las tradicionales canoas mokoro.

Tutwa Desert Lodge (Sudáfrica)

Volvemos a Sudáfrica, aunque en este caso nos acercamos hasta Green Kalahari. En este lugar nos podemos alojar en un establecimiento donde podremos ser vecinos de jirafas, leopardos y cebras. El arte africano domina en la decoración y desde las terrazas de las cabañas se puede ver la fauna indígena y una gran cantidad de vegetación autóctona. Las actividades llevan al visitante a vivir este entorno privilegiado.

Fuente y Fotos | Trivago

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