Conoce los secretos de Halle en Bélgica
La ciudad de Halle nos ofrece la posibilidad de disfrutar de grandes edificaciones históricas, museos y lugares naturales increíblemente interesantes.
En la región de Valonia en Bélgica se encuentra la ciudad de Waterloo. Este nombre puede sonarnos bastante gracias a la mítica canción de ABBA, pero es el lugar donde tuvo lugar la famosa batalla que venció el Duque de Wellington y que supuso el fin del reinado de Napoleón Bonaparte.
Al igual que otros lugares que han sido escenario de batallas memorables, Waterloo se ha convertido en un destino para los aficionados a la historia y las batallas históricas. Waterloo ayuda a esto porque han convertido el recuerdo de este conflicto en una seña de identidad y hay varios lugares que se pueden visitar y que conmemoran estos sucesos.
Este edificio es un museo interactivo que cuenta con una gran exposición que pone en antecedentes al visitante sobre el conflicto europeo que tenía a Napoleón como protagonista. También se puede ver el equipamiento de las tropas napoleónicas y sus adversarios y sus tácticas de combate.
Para ello cuenta con dioramas, maniquís y muchos elementos multimedia que recrean la época y muestran los detalles que forman parte de la historia. También hay un cine que proyecta una película que permite una inmersión en la época y la propia batalla, algo que resulta muy espectacular.
Está abierto desde las 9:30 horas de la mañana, aunque el cierre se realiza de las 17:30 hasta las 19:30, según la época del año. La entrada de adulto cuesta 16 euros y la de los niños 8 euros.
El panorama es una sala circular que está rodeada de un inmenso mural de unos 100 metros lineales. La pintura la realizó Louis Dumoulin en el año 1912, un año después de la construcción del edificio. En esta pintura se recrea la batalla en 360º y para dar una sensación de profundidad se instalaron figuras de yeso en primer plano. No es lo mismo que la película que se ofrece en el Memorial 1815, pero resulta muy interesante para visitar.
La entrada al Panorama está incluida en el precio de la entrada del Memorial 1815, ya que se encuentra junto a este.
La Lion Butte se ubica justo en el lugar donde el hijo de Guillermo I recibió un disparo de mosquete y cayó herido. Fue construida cinco años después de la batalla y se utilizó para ello los restos de la misma. Se eleva 40 metros sobre el suelo y para llegar hasta la cumbre hay que utilizar los 200 peldaños de la escalera. Eso sí, al llegar arriba espera una visión panorámica del campo de batalla y se puede identificar los principales momentos de la batalla gracias a los paneles informativos.
La colina está coronada por un inmenso león de 31 toneladas y no se puede concebir una visita a Waterllo sin, al menos, enfrentarse a esta subida y a disfrutar de las vistas desde lo alto de la Colina del León.
Waterloo ofrece muchos más lugares para disfrutar del recuerdo de este momento tan especial de la historia europea. La granja de Hougoumont es otro de ellos. En esta granja se ubicaron los mandos de las fuerzas aliadas comandadas por Wellington y fue escenario de varias escaramuzas.
Además, en Waterloo se celebran varias recreaciones históricas de la batalla y se puede conseguir una buena experiencia para descubrir esta parte de la historia de Europa.
Esta es la ubicación del Memorial 1815 de Waterloo en Google Maps.
Comentarios cerrados