Las mejores alternativas de aventura en Myanmar
Myanmar, anteriormente conocido como Birmania, es un país que evoca imágenes de antiguas pagodas doradas, paisajes impresionantes y una rica cultura aún por descubrir por muchos viajeros. Si bien Myanmar es conocido por su herencia cultural, el país también ofrece numerosas oportunidades para el turismo de aventura. Desde caminatas por montañas, viajes en globo aerostático y exploración de cuevas hasta cruceros por ríos majestuosos, Myanmar es un destino ideal para los amantes de la aventura.
Una de las experiencias de aventura más recomendadas en Myanmar es el trekking desde Kalaw hasta el Lago Inle. Este recorrido de aproximadamente 60 km, que puede hacerse en tres días, te llevará a través de paisajes montañosos, aldeas tradicionales y tierras agrícolas. El sendero atraviesa plantaciones de té, campos de arroz y pueblos habitados por diferentes grupos étnicos, como los Pa-O, Danu y Taungyo. Los caminantes tienen la oportunidad de alojarse en casas de familias locales, lo que ofrece una inmersión profunda en la cultura y hospitalidad birmana.
Bagan, la antigua capital de varios imperios birmanos, es uno de los sitios arqueológicos más fascinantes del mundo. Con más de 2,000 pagodas y templos que datan de los siglos XI al XIII, el paisaje de Bagan es impresionante tanto desde tierra como desde el aire. Para quienes buscan una experiencia inolvidable, volar en globo aerostático sobre Bagan es una propuesta de aventura difícil de superar.
Para los escaladores y los amantes de las actividades al aire libre, la ciudad de Hpa-An en el sur de Myanmar es un destino excelente. La región está rodeada de formaciones kársticas de piedra caliza que ofrecen diversas oportunidades para la escalada. La montaña de Zwegabin, con su imponente altura y hermosas vistas, es el punto culminante para los aventureros que buscan un desafío físico.
Además de las actividades de escalada, Hpa-An también es famosa por sus cuevas espectaculares. Saddan Cave, una de las más grandes y populares, es una cueva profunda que alberga pagodas budistas y estatuas en su interior. Los aventureros pueden caminar a través de la cueva, que culmina en un pequeño lago donde se puede hacer un paseo en bote para salir por una abertura al otro lado.
El río Ayeyarwady, que atraviesa Myanmar de norte a sur, es el río más largo del país y ha sido una arteria vital para el comercio y el transporte durante siglos. Un crucero por el río, especialmente en el tramo que conecta Mandalay y Bagan, es una aventura relajada pero inmersiva. En el recorrido, los viajeros pueden disfrutar de la vida cotidiana en las orillas del río, pasando por aldeas tradicionales, templos y campos de cultivo. Los barcos suelen hacer paradas en algunos pueblos, lo que permite a los viajeros interactuar con las comunidades locales. Los cruceros pueden durar desde unas pocas horas hasta varios días, dependiendo del itinerario elegido.
Las Islas Mergui, ubicadas en el extremo sur de Myanmar, son un destino ideal para los entusiastas del buceo y el esnórquel. Este archipiélago está formado por más de 800 islas, muchas de las cuales están prácticamente deshabitadas y cuentan con algunos de los ecosistemas marinos más prístinos del sudeste asiático.
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