Marruecos dispone de una serie de lagos emblemáticos y de gran importancia, uno de los interesantes para conocer es el Lago Agüelmame Sidi Ali, un lugar con historia que se encuentra muy cerca de Khénifra, permitiendo que los visitante se puedan acercar durante su estancia en esta zona de Marruecos para conocer un punto natural tan importante y es una zona a la que se puede realizar una excursión.
Marruecos está ligado con los romanos y uno de los lugares de relevancia es la antigua ciudad romana de Volubilis, un lugar que a día de hoy es un sitio arqueológico donde se pueden conocer los restos de lo que fue en su momento una de las grandes ciudades en territorio africano, aunque originalmente la ciudad se fundó por parte de los cartagineses.
La ciudad de Midelt en Marruecos se puede disfrutar de diferentes opciones y uno de los atractivos es un famoso taller que se encuentra en el convento de Notre Dame d´Atlas. Se trata del taller Atelier de Tissage-Kasbah Myriem, que se ha convertido en uno de los más famosos de Marruecos y es conocido gracias a la calidad de los artículos artesanales que pone a la venta.
Un lugar interesante para poder conseguir un souvenir de gran calidad es el Macro Fossiles Kasbah, que se encuentran en la ciudad de Erfoud y se dedican a ofrecer a todos sus clientes una serie de productos y artículos realizados con piedras que se extraen de una zona donde se encuentran con facilidad fósiles de diferentes animales. Se encuentra a pocos minutos del centro de la ciudad de Erfoud.
Un destino natural e interesante para conocer en Marruecos es Ifrane, un pequeño pueblecito encantador que está a poco más de una hora de Fez y en el que podemos ver una zona natural importante. Una zona para los amantes del senderismo es el valle del Oued Tizguit y que nos conduce a la cascada de la virgen o fuentes de Ain Vitel, una zona a la que suelen acudir muchos turistas que buscan un recorrido natural.
Merzouga es una pequeña localidad del sureste de Marruecos, situada a 50 kilómetros de la frontera con Argelia. Es uno de los pueblos más conocidos en el entorno del desierto de Erg Chebbi y, sin duda alguna, las dunas que reciben su nombre son su mayor atractivo. El área en el que se encuentra la aldea es un erg (región arenosa de un desierto), en el que el Sáhara muestra su máximo esplendor.
Junto a las arenas del desierto de Erg Chebbi, encontramos una localidad que quizás no sea demasiado conocida por los turistas, Rissani. En tiempos antiguos tuvo un lugar importante en la economía del país. Llegó a considerarse un punto de referencia para el comercio debido a su localización estratégica que le proporciona una buena comunicación entre los países del resto de África con Marruecos y Europa.
Como suele ser habitual en Marruecos, muchas de sus fiestas más tradicionales tienen que ver con la recolección de las cosechas. En esta ocasión, en el mes de octubre tiene lugar la celebración de la cosecha de los dátiles, producto muy marroquí que resulta exquisito. La celebración se realiza en la ciudad de Erfoud enclavada casi a las puertas del desierto de Erg Chebbi.
En la ciudad imperial de Meknés encontramos varias cosas que hacer y visitar. Curiosamente, una de las actividades más conocidas entre los turistas en esta ciudad es apuntarse a clases de cocina. Como ya he comentado en otras ocasiones, soy de las que opinan que la gastronomía típica de cada región dice mucho de sus habitantes.