Las cuatro visitas indispensables que hacer en Badajoz

Badajoz, una de las dos provincias que conforman Extremdura, es un lugar ideal para visitar en otoño. En verano las temperaturas son bastante altas, así que en cuanto llega esta estación es el momento ideal para disfrutar de una escapada en familia o en pareja. Badajoz es una ciudad fundada en el año 875 d.C., aunque ha sido hogar de varias culturas que han vivido en la zona desde miles de años antes. Te enseñamos cuatro rincones de Badajoz que has de visitar durante tu escapada de otoño.

Alcazaba Árabe de Badajoz

En el punto más antiguo de Badajoz, el Cerro de la Muela, está protegido por la Alcazaba Árabe, edificada para controlar el paso desde la meseta hasta los territorios de Andalucía y Portugal. Es un recinto ovalado de origen almorade, que cuenta un importante lienzo de murallas. Estas cuentan con varias torres que reciben el nombre de torres albarranas. La más importante de todas ellas es la Torre de la Atalaya o Torre de Espantaperros.

Como curiosidad, esta torre se dice que fue la inspiración para levantar, 50 años después de su construcción, la Torre de Oro de Sevilla. En el interior se puede visitar el Palacio de los Condes de la Roca, que hoy alberga el Museo Arqueológico de Badajoz.

Aquí puedes encontrar la ubicación de la Alcazaba Árabe de Badajoz.

La Plaza Alta

Junto a la Alcazaba Árabe se encuentra la Plaza Alta, que se ha restaurado en fechas recientes y que ha recuperado su lugar como punto de encuentro para los vecinos de Badajoz y como lugar para visitar en la ciudad. En esta plaza se celebra el mercado árabe que conmemora la fundación de la ciudad, a finales del mes de septiembre.

En la Plaza Alta se encuentra el Convento de las Madres Adoratrices, que fue levantado a principios del siglo XX.

Catedral de Badajoz

La Catedral de Badajoz es una construcción bastante peculiar. Se construyó fuera de la protección que ofrecía la Alcazaba Árabe de Badajoz, así que se diseñó como si fuera una fortaleza. Está ubicada en la Plaza de San José, hoy un importante centro comercial de la ciudad. El cuerpo de la iglesia se construyó entre los siglos XIII y XIV, debido a distintas circunstancias.

Su fachada es muy sencilla y carece de elementos decorativos, aunque en el interior se puede disfrutar de varios elementos importantes y de gran valor. La pila bautismal de alabastro, una talla de Santa Bárbara del siglo XVIII o el retablo de alabastro de La Virgen con el Niño son alguna muestra del arte sacro que alberga en su interior.

Esta es la ubicación de la Catedral de Badajoz.

Las murallas y las puertas de acceso a la ciudad

La muralla de Badajoz se puede visitar y pasear por la parte superior. Desde allí se obtienen vistas muy interesantes de la ciudad. Un paseo por este lienzo fortificado es una de las cosas que se ha de realizar sin dudar cuando se visite Badajoz. Las murallas abalartuadas se construyeron entre los siglos XVII y XVIII y fueron fundamentales por la estratégica situación de la ciudad, de la que ya hemos comentado que era zona de paso entre la meseta y Andalucía y Portugal.

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