Viajar con mascotas: Salamanca, ciudad ‘petfriendly’
La ciudad de Salamanca ha habilitado varios espacios petfriendly para que puedan ser visitados por personas en compañía de las mascotas durante las vacaciones.
La Senda de los Mil Colores, una experiencia al aire libre en Salamanca
En la Sierra de Francia, en la provincia de Salamanca, se puede recorrer la Senda de los Mil Colores, una ruta que recorre el trayecto entre Cepeda y Madroñal.
Las actividades al aire libre son algo que no pueden faltar cuando se tiene tiempo libre. En España hay muchas alternativas para disfrutar de unos días de ocio y desconexión. En la Sierra de Francia, en la provincia de Salamanca, se puede encontrar una interesante ruta que aúna lo mejor de esta zona, la gastronomía y la visita a poblaciones muy interesantes.
En la Senda de los Mil Colores, la naturaleza ofrece un espectáculo único en cada estación del año. Se trata de una ruta que se puede hacer solo, en familia o en pareja. La posibilidad de hacer esta ruta en bicicleta o andando hace que sea mucho más agradable la oportunidad de recorrer este trayecto entre Cepeda y Madroñal.
La Senda de los Mil Colores discurre por un sendero tradicional, una pista con espíritu forestal y agrícola. Tiene una longitud de alrededor de 10 kilómetros y se puede realizar en cuatro horas. Como ya hemos comentado, se puede realizar en familia o solo, ya que tiene una dificultad muy baja.
El itinerario está señalizado con marcas de color amarillo y blanco, como todos los recorridos de pequeño recorrido y tiene como denominación PRCSA-20. Paseando por esta ruta se puede conocer mejor el entorno paisajístico y cultural de la región. Durante el recorrido se pasa por bosques de encina y robledales, con el añadido de restos de antiguos molinos y construcciones del pasado, paseando por caminos serpenteantes.
Durante el recorrido vamos a encontrar un espectacular puente medieval, el Puente de la Dehesa, que atraviesa el Arroyo del Coso, junto con otras cosas que atraen la mirada del visitante. En cuanto a la naturaleza, los castaños, los madroños y una completa variedad de árboles conforman un espectáculo que engancha a quien pasea entre ellos.
Cepeda y Madroñal
La Senda de los Mil Colores es una ruta circular y se puede comenzar por cualquiera de los dos pueblos. Si se elige comenzar por Cepeda, el inicio de la ruta se ubica en la fuente romántica que está en la circunvalación, en la carretera C-512 en dirección a Sotoserrano. Cepeda se encuentra en la la lader de un monte de la Sierra de Francia y en esta población viven 550 habitantes.
En Cepeda destacan las casa de sus calles, con líneas de madera dispuestas por las fachadas. La avenida de los Reyes Católicos llega hasta la Ermita del Humilladero y el Antiguo Colegio, dos lugares en los que hay que detenerse.
En Madroñal, hay que tener en cuenta que su nombre proviene del Madroño. Sin embargo, es el cerezo el que mejor define a este pueblo salamantino. En la zona sur de Madroñal encontramos fincas agrícolas con frutales, prados y tierras de labranza. Los colores explotan en la primavera, pero también resultan visualmente impactantes en otros momentos del año.
El bosque multicolor se extiende un poco más allá y lleva hasta Cepeda de la Sierra. Este tramo es rico en muchas variedades de árboles propios de la región, que ofrecen una imagen luminosa y vibrante. Una vez recorrido este paraje, se llega a cualquiera de los dos pueblos, dependiendo de cuál de ellos se haya elegido para comenzar el viaje. Allí se puede disfrutar de su cultura, su gastronomía y de todos los encantos que tienen ambos.
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