Visitar Mallorca, una escapada ideal para Semana Santa

Aunque siempre pensamos que viajar hasta la isla de Mallorca es mejor en verano, en esa época del año hay mucha más gente y es más complicado poder visitar la isla con la tranquilidad que se necesita. Además, los precios suben de manera excesiva y es complicado encontrar un alojamiento en condiciones y con un precio asequible. Semana Santa no es tampoco una época barata, pero sí lo es más que en pleno verano.

Además, el clima de las islas Baleares suele ser bastante benigno y aunque la temperatura del Mediterráneo no es todavía la adecuada para disfrutar de los baños, se puede visitar las playas para tomar el sol en ellas y sentirse casi como en verano. Aún así, es posible que se pueda encontrar algún día lluvioso, con viento o nuboso. Aún así, no pasa nada, porque las isla de Mallorca suele contar con buen tiempo durante muchos días y en la temporada de Semana Santa, suele ser benigno.

La playa se convierte en algo realmente interesante, con mucha menos gente que durante los meses de verano, pero Mallorca ofrece muchos más alicientes para disfrutar de una escapada de Semana Santa agradable y repleta de actividades. Recorrer la ciudad de Palma de Mallorca es una de las buenas ideas que podemos disfrutar durante esos días de descanso y ocio. La Plaza Mayor es un buen punto de partida. Se puede visitar también la Catedral y hacer un recorrido por las calles de esta ciudad mediterránea, que ofrece muchos puntos de interés más allá de la playa.

También se puede optar por alquilar un coche y realizar alguna de las rutas que se abren en la isla. Una de ellas puede llevarnos hasta las muy conocidas Coves del Drach y otros lugares como puede ser el Parque Natural de S’Albufera, muy cerca de Alcudia, donde hivernan unas 10.000 aves cada año, algo que resulta bastante espectacular y que es un espectáculo para los aficionados a las aves.

La sierra de Tramontana, con lugares tan vistosos como la Granja de Esporles o Valdemossa, es otra opción para recorrer en coche. El litoral oriental tiene también una buena ruta, que puede partir de Andratx y que mostrará a los visitantes una gran cantidad de rincones atractivos. Con el coche se pueden realizar varias rutas en poco tiempo, así que durante esta escapada de Semana Santa se puede hacer al menos una, complementando la visita a Palma de Mallorca.

La gastronomía de la isla es otro de los alicientes que podemos encontrar para visitarla durante la Semana Santa o en fechas próximas al inicio de la primavera. El frito mallorquín, con verduras y carne de cordero o cerdo, es un plato que no debe faltar, pero los arroces y embutidos también son platos que deben probarse durante esos días en la isla. Hay muchos motivos para disfrutar de unos días agradables de inicio de primavera en Mallorca.

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