Catedral de Notre Dame

La Catedral de Notre Dame es uno de los símbolos más representativos para este país. Ciertamente, al elegir como destino París, pasear por esta impresionante estructura será una visita obligada que no debe dejar pasar. Fue construida en el año 1163 y posee un estilo gótico, el cual le otorga una espectacular y admirable fachada; y se encuentra situada en el IV distrito de la capital francesa, en la pequeña isla de la Cité, rodeada por el río Sena.

En este sentido, la Catedral de Notre Dame es uno de los lugares más visitados en todo el mundo por los turistas. Quienes estén interesados apreciarla, deben saber que la entrada a ésta es gratuita, aunque por lo general muchas veces hay que esperar debido a que se forman largas filas de viajeros para acceder a ella.

De esta manera, la Catedral también tiene un importante valor religioso. Pues la estructura está dedicada a la Virgen María, Madre de Jesucristo, por quien recibe su nombre “Notre Dame”, cuya traducción al español quiere decir “Nuestra Madre”.

Las cuestiones más importantes a tener en cuenta al visitar la Catedral tiene que ver especialmente con su particular y magnífico órgano Cavaille-Coll, el cual, se constituye como uno de los más altos honores a los que puede aspirar un músico dedicado a este instrumento.

Además, resulta interesante saber que ésta plaza fue ocupada por el genial organista y compositor francés Louis Vierne, entre los años 1900 y 1937, período en el cual se recuerda la del mayor esplendor de la catedral como centro artístico y musical.

Vía | Turismo en Francia
Foto | Flickr-Scottgunn

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