Cómo comportarse en el Barrio Rojo

Uno de los rincones más famosos de Amsterdam es el Barrio Rojo y lo es, pese a sus muchos intereses, por las prostitutas. El hecho de que la prostitución sea legal y que las mujeres se muestren a través de los ventanales de las casas como si se tratase de un escaparate es un hecho que ya de por sí ciertamente llama la atención, porque es algo que no estamos acostumbrados a ver.

Por eso, porque a buen seguro que vas a acabar allí, tengas o no intención de usar los servicios de estas trabajadoras, vamos a hablar un poco de cómo hay que comportarse en el lugar. No es que hayan unas normas estrictas que cumplir, pero sí que hay que tener algunas cosas en cuenta. No olvidemos que lo que hay en los escaparates son personas, que merecen todo nuestro respeto y que simplemente están ejerciendo un oficio, legal además en este país.

Amén de comportarse civilizadamente, eso hay que darlo por hecho, hay una cosa que no se puede hacer, y es echar fotos a las mujeres. No olvidemos, y lo recuerdo una vez más, que son personas, no monos de feria como se suele decir. Tenemos que pasear por las calles tomando lo que vemos como algo natural, y no deteniéndonos demasiado tiempo a mirar. Eso en general no está para nada bien visto, y te pueden decir algo por ello.

Otra cosa que no debes hacer en general es acercarte a un escaparte en demasía. Y es que ese es el método que se utiliza para contratar los servicios de las prostitutas. Así que, salvo que tengas esa intención, procura no hacerlo no sea que se pueda producir un malentendido.

Evidentemente, esto sólo son unos consejos, no unas normas obligatorias o estrictas. Es más, seguro que te encuentras muchos turistas saltándose estos consejos a la torera y, en algunos casos, dando vergüenza ajena. Pero yo lo dejo ahí, ya está en cada cual el cómo comportarse.

Foto | Rob Marson

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