El Carnaval en Holanda, una fiesta casi exclusiva del sur del país
Aunque el Carnaval es una fiesta de origen pagano, el Carnaval que hoy día celebramos es una fiesta relacionada con la religión católica. No en vano, se celebra justo antes de la Cuaresma, los 40 días anteriores a las fiestas de Pascua, y por eso su fecha varía de un año para otro.
Así pues, ¿qué ocurre en un país como Holanda, donde hay tantos católicos como protestantes? Pues que el Carnaval no es una fiesta de mucho arraigo, excepto en las zonas donde la religión católica es la mayoritaria. Y esa zona viene a ser el sur del país. Así pues, ya sabéis que en el norte son de mayoría protestante, y en el sur, en las provincias de Limburgo y Brabante Septentrional, en ciudades como Maastricht, Roda o Eindhoven, de entre las más conocidas.
Otros lugares de los Países Bajos donde se celebra el Carnaval son la parte católica de la provincia de Frisia, así con en parte del Randstad. En esta gran conurbación podréis disfrutar del Carnaval de Delft, así como también del Carnaval de Rotterdam, aunque para celebrar el de esta ciudad hay que esperar al verano.
Según la tradición de cada pueblo o ciudad se distinguen dos tipos de Carnaval. Uno es de ascendencia germana, y se conoce con el nombre de Rijnlands, y el otro es más afrancesado o más propio de la región belga de Flandes, y se conoce como Bourgondisch. Cada uno tiene sus diferencias, como diferentes actos o diferentes formas de vestir.
Lo que sí es común a todos los Carnavales, ya sea del tipo que sea y de la región que les plaza, es las ganas de juerga. Ya os he contado varias veces que a los holandeses les encanta la calle, e ir de bar en bar a beber con los amigos, y el Carnaval es las excusa perfecta para hacerlo en febrero, cuando todavía no hace buen tiempo para ello, y encima disfrazado, que es más divertido todavía.
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