Grolsch, otra famosa marca de cerveza holandesa

Seguimos de ruta cervezera (¿se nota que me gusta o no?) haciendo un repaso a las marcas de cerveza más famosas de los Países Bajos, que las hay y muy buenas. Hoy toca hablaros de Grolsch, una marca con mucha historia pues se comenzó a elaborar en el año 1615, así que les falta poco para llegar a su cuarto centenario de vida.

Cuenta la historia que la primera cerveza Grolsch fue un regalo que hizo Peter Cuyper a un maestro cervecero de la ciudad de Groenlo, para pedirle la mano de su hija. Al final, el señor Cuyper no sólo logró casarse con la mujer que quería, sino que entró de lleno en el negocio familiar que hoy en día se ha convertido en una importante empresa de los Países Bajos. No en vano, hablamos de una de las 25 marcas más vendidas en todo el mundo.

Más que por su sabor, la cerveza Grolsch es conocida por su envase. Esa botella verde (el auténtico verde botella), con el logo y el nombre de la marca en relieve, y con ese tapón que podéis ver en la imagen, típicos de las antiguas botellas de La Casera, hacen fácilmente reconocible a esta marca, es su principal seña de identidad diría yo. En ese envase viene la cerveza más popular de la marca, la lager, pero hay más variedades.

Hoy día podéis disfrutar de todas las variedades de la marca Grolsch en un tour guiado a través de su fábrica, donde además de las degustaciones podréis conocer la larga historia de esta marca y como funciona una fábrica de cerveza moderna. Los tours se llevan a cabo los miércoles, los jueves y los viernes, con un turno de mañana, que es más barato (10 euros) y un turno de tarde (12 euros).

La Grolsch ya no se elabora en Groenlo, sino en una localidad cercana y de mayor población, Enschede. Enschede es una ciudad moderna y de carácter industrial, prácticamente pegada a la frontera con Alemania, dentro de la provincia de Overijseel.

Web oficial | Grolsch
Foto | Flickr – Catherine Scott

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