El Lago di Como
A 49 kilómetros de Milán se encuentra el Lago de Como o Lario (Lago di Como), el cuarto más profundo de Europa y uno de los más bellos. Lugar de vacaciones de personajes conocidos desde los tiempos de Leonardo a la actualidad, el Lago de Como es el destino perfecto para los amantes de la naturaleza, la historia y los deportes acuáticos.
El lago puede recorrerse por carretera, bordeándolo y visitando los pintorescos pueblos y villas de sus orillas, sin olvidarnos de la ciudad de Como. Aquí al menos habría que visitar la Catedral (Duomo), el antiguo Ayuntamiento (Broletto), la Basílica de San Fedele, las murallas y la estatua de Garibaldi, el edificio de Terragni, la plaza Verdi y la Via Emanuele. También es muy bonito visitar Brunate, utilizando el funicular.
La otra opción para visitar el lago es la más típica, en barco. Hay excursiones organizadas que permiten ver los monumentos y lugares más significativos y atractivos. Villas del quinientos como Villa Pliniana y del ochocientos, Cernobbio, el impresionante hotel Villa d’Este, Pizzo, Moltrasio donde está la finca de la familia Versace, etc. También desde el Lago se puede ver el Castillo de Unio, la cascada de Nesso, Brienno, Argegno y mucho más. Dependiendo del tipo de tour se hace escala en uno o dos pueblos para poder recorrerlos. El viaje suele ser de día completo.
Puedes llegar al Lago de Como desde Milán por tren tomándolo en la estación de Cardona. El viaje dura una hora aproximadamente. En coche se tarda entre 30 y 40 minutos por lo que puede ser una excursión de un solo día. Si vas a estar unos días, pregunta en tu agencia de viajes, hay hoteles muy interesantes. Como decíamos al principio es un buen lugar para practicar deportes acuáticos, el alto Lario es especialmente interesante por sus fuertes vientos.
Foto | Flickr-mongannalisa
Más información | Lario online