El Museo Ducati, en Bolonia

Para los aficionados italianos a las pruebas de motor el rojo es su color de referencia. Si estamos hablando de una prueba de Fórmula 1, los tiffosi se visten de rojo tal y como lucen los Ferrari. Si, en cambio, hablamos de una prueba de motociclismo, el rojo es el color de Ducati.

Ducati es otra de las marcas, de las imágenes famosas que Italia exporta al mundo entero. Una empresa familiar que surgió en la década de los años 20, aunque hasta los años 50 no iban a diseñar las primeras motocicletas, pues en un principio los orígenes de esta empresa de Bolonia fueron como fabricantes de aparatos electrónicos como por ejemplo radios.

La historia de toda la marca se repasa en un Museo que tienen en sus instalaciones centrales en Bolonia. Desde aquellos años iniciales cuando el ingeniero Antonio Cavalieri Ducati creó la empresa, los malos años antes, durante y después de la Segunda Guerra Mundial, el paso a diseñar motocicletas, la entrada en el mundo de las competiciones deportivas allá por los 70, la gran crisis de los 90 y la salvación al caer en manos de grandes grupos empresariales.

Un gran repaso que hará las delicias de los fans de la marca, o del motociclismo en general, en un museo repleto de recuerdos y, por supuesto, de motocicletas. Para conocerlo, y de paso visitar la fábrica, hay que hacer reserva previa, de manera obligatoria, y pagar el precio de la entrada que es de 10 euros, nada mal teniendo en cuenta que se trata de una visita guiada.

Web oficial | Ducati
Foto | Flickr – Jimmyweee

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