Los nuevos lugares Patrimonio de la Humanidad en 2019 (II)

Segundo artículo en el que repasamos los nuevos 29 sitios que han sido incluidos este año 2019 en la lista del Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO.

Sistema de gestión del agua de Augsburgo (Alemania)

Desde el siglo XIII, la ciudad de Augsburgo fue creando un sistema de gestión del agua, tanto para abastecer de agua potable como para generar energía, que ya funcionaba muy bien y que sigue funcionando igual desde entonces. Eso ha llevado a esta ciudad entre dos ríos, con ya de por sí numerosos intereses turísticos, a sumar la entrada número 46 para Alemania en la lista del Patrimonio de la Humanidad.

Cría y entrenamiento de caballos en Kladruby nad Labem (República Checa)

Kladruby nad Labem es una ciudad checa al oeste de Praga famosa a nivel mundial por la cría de caballos, caballos blancos especialmente entrenados para el transporte ceremonial y que han paseado a reyes y otras grandes personalidades en Praga, Viena y media Europa. La tradición de estas caballerizas reales viene del siglo XVI, y teniendo en cuenta que aún perdura, eso la convierte en la más antigua del mundo.

Minas de Erzgebirge y Krusnohori (Alemania y República Checa)

Aparte de los ya mencionados, Alemania y República Checa comparten una entrada en la lista del Patrimonio de la Humanidad, la de la región minera de las Montañas Ore. En esta zona fronteriza, la UNESCO ha destacado sus más de 800 años de tradición, la industria minera y la belleza de los paisajes, que cada año cautivan a millones de turistas que visitan la región.

Bagan (Myanmar)

La ciudad de Bagan, en el país llamado Myanmar y conocido como Birmania, no es muy conocida pero ahora que ya es Patrimonio de la Humanidad seguro tiene un repunte turístico. Los nuevos visitantes descubrirán una antigua capital que, pese a estar en una zona de gran actividad sísmica y sufrir muchos terremotos, todavía conserva parte de su esplendor llena de estupas, los templos budistas,de varios estilos arquitectónicos.

Patrimonio minero de Ombilin en Sawahlunto (Indonesia)

A finales del siglo XIX, cuando Indonesia no era un estado independiente sino una colonia de Holanda, comenzó la extracción de carbón en una zona bastante aislada de la isla de Sumatra. El legado de aquella explotación minera de Ombilin, sita en la ciudad de Sawahlunto, ha sido incluido en el Patrimmonio de la Humanidad, entre otras cosas, por aquello de ser la explotación más antigua de carbón en esta parte de Asia.

Ruinas de Liangzhu, y Santuario para aves migratorias en la Costa del Mar Amarillo – Golfo de Bohai (China)

China aparece por partida doble en la lista de nuevos sitios de este año 2019. Por un lado, tenemos las Ruinas de Liangzhu, un sitio arqueológico con más de tres mil años de historia. Por otro, las marismas más grandes del mundo, que son las zonas intermareales del la costa del Mar Amarillo y el Golfo de Bohai, un lugar de importancia capital para las aves migratorias en ruta entre Asia y Australia.

Iglesias de la escuela arquitectónica de Pskov (Rusia)

Cerca de la frontera rusa con Estonia encontramos la ciudad de Pskov, que ahora entra en la lista del Patrimonio de la Humanidad gracias a sus iglesias. Y no son pocas las que se pueden encontrar en un paseo, más de una decena y de varios estilos con la Catedral de la Trinidad como la más importante de ellas. Es el legado que le queda a esta ciudad, que llegó a ser una de las más importantes del país.

Ruinas de Babilonia (Irak)

Una de las siete maravillas del mundo antiguo son los Jardines Colgantes de Babilonia, una civilización ya perdida que se desarrolló en el territorio de la actual Irak. A menos de 100 kilómetros de la capital, Bagdag, se encuentran los principales restos arqueológicos encontrados de la antigua capital de este imperio, la inspiradora Babylon, que a partir de este año 2019 ya forman parte del Patrimonio de la Humanidad.

Tumbas Mozu Furuichi en Osaka (Japón)

Se llama kofun a un grupo de monumentos megalíticos, normalmente de carácter funerario, del antiguo Japón, típicos de los siglos III y IV, época precisamente bautizada como Periodo Kofun. El mayor y mejor ejemplo de este tipo es el que se encuentra en la ciudad de Sakai, dentro de la prefectura de Osaka, las tumbas de Mozu Furuichi, y el reconocimiento como Patrimonio de la Humanidad ayudará a la conservación de estos espacios, muchos de los cuales ya se han perdido.

Foto 1 | Flickr – Bjorn Golda
Foto 2 | Flickr – Marcela Tokatjian
Foto 3 | Flickr – Andrey Korchagin

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