La importancia de contar con un buen seguro de viajes antes de las vacaciones
Cuando se acerca el momento de pensar en las vacaciones, tenemos siempre ganas de comenzar con la aventura. Un viaje es siempre uno de los grandes momentos que nos toca vivir, así que queremos que todo esté perfecto y vivamos las mejores vacaciones de nuestras vidas. Pero, por desgracia, hay ocasiones en las que no todo sale como queremos y podemos llegar a encontrarnos con algún imprevisto que nos estropee las vacaciones. Para evitar que todo sea peor de lo que nos encontremos en un principio, es mejor contar con un buen seguro de viaje.
Todo puede comenzar a ir mal si tenemos que cancelar el viaje. Siempre y cuando sea por una causa de fuerza mayor y esté incluido en la póliza, el seguro con cancelación se hará cargo de los gastos del viaje. Esto quiere decir que si existe una operación quirúrgica, un accidente o un deceso que impida el viaje, por poner algunos ejemplos extremos, el seguro evitará que el dinero se pierda. Y, cuando las cosas se solucionen, se puede volver a invertir ese dinero en el viaje.
Perder la maleta en destino
Pero aunque el viaje comience, se puede perder el equipaje. Sabemos que las compañías aéreas suelen gestionar bastante mal estas cosas, pero el seguro de viaje sirve precisamente para eso, para que contemos con una garantía en estos casos. En caso de que la maleta se pierda, el seguro garantiza el coste de los productos de primera necesidad que haga falta comprar para reponer los que se han perdido. Además, es la compañía aseguradora la que reclama a la aerolínea y quien se hace cargo de la recuperación del equipaje.
También se puede incluir en la póliza del seguro una cláusula que nos proteja del robo o el daño sufrido del equipaje. En caso de cancelaciones o retrasos, el seguro de viaje también cubre los gastos ocasionados por estos inconvenientes, como las noches de hotel que se tengan que reservar por esta emergencia o las comidas en el aeropuerto mientras se espera el vuelo alternativo.
Atención médica cubierta durante toda la duración del viaje
Una cosa importante es la atención médica en el extranjero. Tener un accidente, un tropezón tonto, una picadura inoportuna o una infección puede fastidiar algo más que las vacaciones. La atención médica suele ser muy cara y puede darnos más de un disgusto. En estos casos, es el seguro médico de viaje el que se encarga de todos los gastos. Incluso el del acompañante o de la persona que tenga que ir desde el país de origen para hacerse cargo del enfermo. Un gasto inoportuno e innecesario del que se hace cargo el seguro de viaje.
Viajar es siempre un placer y siempre ha de serlo. Pueden pasar muchas cosas, pero todo se hace más sencillo si sabemos cómo elegir el seguro de viaje adecuado de forma que nos ayude a hacerlo todo más llevadero. ¿Ya has contratado el tuyo antes de salir de viaje?
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