Chaouen y sus casas blanco azulado
Este municipio mágico se encuentra entre dos montes de las cordilleras del Rif a 660 metros de altitud. Es conocida como Chaouen, Chefchouen o Xaouen. Su nombre proviene del berebere, fundadores del municipio y significa «mira los cuernos», debido a que los montes que la rodean parecen cuernos que sobresalen.
La Medina de Chaouen te sorprenderá por sus serpenteantes calles y sus casas de color blanco azulado. Se accede a ella mediante cinco puertas situadas en diferentes puntos de la localidad. Debido a sus calles estrechas y sus callejones sin salida hay poco tránsito de coches por lo que es un lugar ideal donde respirar aire limpio.
En Xaouen debes parar a tomar un refresco en la Plaza Uta el-Hammam donde podrás contemplar el ir y venir de los habitantes frente al edificio de la Gran Mezquita o la Kasbah. En la Kasbah no dejes de visitar sus jardines de gran belleza y su museo donde encontrarás una pequeña muestra de armas, textiles, instrumentos y fotos de la ciudad.
Los lunes y los jueves puedes disfrutar curioseando en el mercado de la parte más nueva donde la gente de la montaña vestida con trajes tradicionales intenta vender sus productos. Uno de los lugares más bonitos de la localidad es el riachuelo Bab el-Ansar y la fuente Ras el-Maa donde todavía es posible ver a las mujeres haciendo la colada bajo el murmullo de la corriente del agua.
Para los amantes de la naturaleza, puede resultar interesante hacer excursiones a las montañas donde pueden descubrirse parajes prácticamente vírgenes. El Puente de Dios es un arco de roca a 25 metros por encima del riachuelo. También es posible visitar andando desde Chaouen, el parque Nacional de Talassemtane donde se encuentra una mezquita rodeada de especies autóctonas.
Vía | Chaouen
Foto | Flickr-Ana P.Bosque
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