Aunque lleguemos al lugar de destino en transporte público, podemos alquilar un coche para recorrer otros lugares cercanos sin horarios ni agobios
Cuando pensamos en comenzar a planificar las vacaciones pensamos en cómo viajaremos hasta nuestro destino. Si elegimos una ciudad más o menos grande, podemos disfrutar de las ventajas del transporte público para movernos. Además, la ciudad cuenta con suficientes atractivos como para no tener que salir de la misma y disfrutar de nuestro tiempo libre sin necesidad de utilizar el coche. Pero cuando el destino es una población más pequeña, eso puede ser un problema. Si tampoco queremos utilizar nuestro coche para los desplazamientos por el destino elegido, por el motivo que sea, tenemos una muy buena opción: alquilar un coche.
Las ventajas de elegir un coche de alquiler una vez en el punto de destino son bastantes. Para comenzar, aunque el traslado hasta la ciudad elegida se realice en tren o avión, una vez en el aeropuerto o la estación se puede optar por uno de estos vehículos. Así nos podemos mover con libertad por el lugar de destino vacacional. Es la mejor alternativa para poder hacer excursiones desde la ciudad de destino sin necesidad de preocuparse por el transporte público.
La autonomía y la libertad que ofrece un coche de alquiler permite descubrir el destino vacacional y sus alrededores. Además, no solo permite llegar hasta los puntos más importantes de esa ciudad o región, sino también perderse por lugares donde no existe la masificación y la presencia de la gente. El salir de las rutas más visitadas permite descubrir pequeños pueblos, calas escondidas y olvidarse de los horarios. Yendo en coche, se puede parar en cualquier sitio a comer, disfrutar de una puesta de sol o volver al hotel o apartamento reservado a la hora que se quiere.
Otra de las ventajas de alquilar un coche es que no es necesario tenerlo durante todo el viaje, creando gasto y con el riesgo que conlleva tener aparcado el vehículo propio en lugares donde no se conoce. Planificando el viaje se puede tener, por ejemplo, unos días para visitar la ciudad utilizando el transporte público y dejar otros tantos haciendo excursiones por los alrededores. De esta manera, solo tendríamos que alquilar el coche por esos días en los que fuéramos a utilizarlo.
Antes de alquilar un coche para moverse por el lugar de destino, es importante revisar las distintas compañías de alquiler de coches de la zona, para ver qué tipo de coches tienen disponibles y cuál se ajusta mejor a lo que se necesita. No hace falta un coche muy potente ni grande si se van a realizar trayectos cortos y solo son dos personas. Si se viaja en compañía, quizá haga falta un coche más grande y potente, así que es mejor buscar el que mejor se adapta a nuestro viaje y presupuesto.
El mes de julio se convierte en el momento en el que muchos turistas españoles suelen salir de vacaciones y aprovechan su tiempo libre. Se acaba de realizar una cuesta en la que se ha preguntado a los turistas españoles sobre la posibilidad de viajar en coche o en otro medio de transporte. Curiosamente un […]
Hay que tener en cuenta que se ha de tener el carnet de conducir en regla y que lo vamos a coger con el depósito lleno. Debemos devolverlo igual que lo hemos cogido. Si no lo hacemos así, nos cobrarán a través de la tarjeta de crédito, que nos habrán solicitado antes, el precio de repostaje más un extra por haberlo realizado ellos.
De todas maneras, viajar con un coche de alquiler durante las vacaciones puede ser toda una aventura, sobre todo si te gusta conducir y dejarte llevar durante esos días de descanso y aventura. ¿Lo has hecho alguna vez?