Castillos interesantes para conocer en Portugal

Portugal es un país con una rica historia medieval, reflejada en sus impresionantes castillos que han sido testigos de batallas, conquistas y leyendas. Desde fortalezas en la cima de colinas hasta castillos de cuento de hadas, aquí te presentamos algunos de los castillos más fascinantes que puedes visitar en Portugal.

El Castillo de Pena en Sintra es, sin duda, uno de los castillos más icónicos de Portugal. Ubicado en lo alto de las colinas de Sintra, el Palácio da Pena parece sacado de un cuento de hadas con su mezcla de colores vibrantes y arquitectura romántica. Fue construido en el siglo XIX y ofrece vistas panorámicas impresionantes de la región. Su interior conserva una decoración lujosa, y sus jardines rodeados de naturaleza lo convierten en un lugar imperdible.


Óbidos es una de las ciudades medievales mejor conservadas de Portugal, y su castillo es una de sus joyas. Construido en el siglo XII, esta fortaleza de piedra con murallas bien conservadas se ha convertido en una pousada (hotel histórico), lo que permite a los visitantes pasar la noche en un ambiente medieval. Además, recorrer las estrechas calles empedradas de Óbidos es como viajar en el tiempo.

Conocido como la «cuna de Portugal», el Castillo de Guimarães es uno de los más importantes del país. Construido en el siglo X, se dice que aquí nació el primer rey de Portugal, Alfonso Henriques. Su imponente estructura de piedra y sus torres bien conservadas lo convierten en un destino imprescindible para los amantes de la historia.

Situado en una isla en medio del río Tajo, el Castillo de Almourol es uno de los castillos más fotogénicos de Portugal. Construido en el siglo XII por los Caballeros Templarios, este castillo medieval parece sacado de una leyenda. Solo se puede acceder en barco, lo que lo hace aún más especial.

Ubicado en la cima de una montaña en la región del Alentejo, el Castillo de Marvão ofrece unas vistas espectaculares del paisaje circundante. Su ubicación estratégica lo convirtió en una fortaleza clave en la defensa del país. Pasear por sus murallas es una experiencia única, ya que brinda una sensación de estar en lo alto del mundo.

Dominando la capital portuguesa, el Castillo de São Jorge es uno de los principales puntos turísticos de Lisboa. Se remonta al siglo XI y ha sido testigo de la historia de la ciudad a lo largo de los siglos. Sus murallas ofrecen vistas panorámicas de Lisboa y el río Tajo, convirtiéndolo en una visita obligada para quienes exploran la ciudad.

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