Cinco miradores de Lisboa que hay que visitar
Lisboa es una de las ciudades más románticas de Europa, ya que tiene una tradición que esconde muchos momentos que atienden al amor, o quizá al desamor, con el fado como una de sus representaciones más destacadas. Pero uno de los grandes alicientes que tiene la capital portuguesa son los miradores. Desde estos lugares, estratégicamente ubicados por toda la ciudad, se pueden obtener imágenes espectaculares de Lisboa. Vamos a hacer un repaso a cinco de ellos, posiblemente no los mejores, porque eso depende del gusto de cada uno, pero que seguro que soprenderán a quien se asome desde ellos.
Mirador del Castillo de San Jorge
Las vistas desde el Castillo de San Jorge son de las mejores que se pueden encontrar de Lisboa. El castillo, que ya vale la pena visitar por sí mismo, está una colina desde donde se domina toda la ciudad y desde el cual se puede obtener una imagen espectacular. Además de la vista de Lisboa desde sus murallas, se puede obtener una vista panorámica en 360º gracias al periscopio de Leonardo DaVinci en la Torre de Ulises. Los jardines y las torres que conforman el Castillo de San Jorge son un buen argumento para perderse por este enclave privilegiado.
Mirador del Arco da Rua Augusta
Se trata de un mirador de reciente construcción que se ubica en lo mas alto del Arco de Rua Augusta, la puerta de entrada a la Praça do Comércio, una de las mas conocidas y visitadas de la ciudad. El Arco es parte de las nuevas construcciones que se levantaron tras el terremoto del siglo XVIII y desde entonces es uno de los monumentos más importantes de la ciudad. De todas maneras, no es el original, ya que este se demolió porque no había consenso sobre él. Se levantó después otro en el siglo XIX, que es el que permanece en la actualidad. Se accede al mirador a través de un ascensor ubicado al final de la Rua Augusta, justo antes de pasar bajo el arco y desde él se tienen unas estupendas imágenes de la plaza, el Castillo de San Jorge y la Catedral.
Mirador da Senhora do Monte
En una de las partes más altas de la ciudad se abre este mirador, que permite descubrir el Castillo de San Jorge, omnipresente, desde otro ángulo. También se abre a los pies del observador todo el casco histórico de Lisboa, Es un lugar con mucha tradición y está ubicado junto a la capilla de Nossa Senhora do Monte, que fue reconstruida tras haber sido destruida por el terremoto de 1755, aunque no en su ubicación original. A esta capilla llegaban las embarazadas de Lisboa para pedir protección durante el parto. Allí está la Silla de Piedra de San Gens, donde se sentaban para solicitar protección.
Mirador de Santa Lucía
El Mirador de Santa Lucía se ubica junto a la iglesia del mismo nombre, en el emblemático barrio de Alfama. Se trata de un mirador puramente lisboeta, con un aspecto muy característico. Paredes blancas, azulejos desconchados en las paredes y parras trepando por construcciones de madera desde el que se tiene una imagen muy evocadora de la capital.
Mirador de San Pedro de Alcántara
Este mirador está ubicado en los jardines de San Pedro de Alcántara, que está en el Barrio Alto. Se puede acceder hasta este mirador con el elevador da Glória y desde él se puede ver no solo esa bella imagen de Lisboa, sino también unos jardines con estatuas y un buen paseo entre la vegetación de sus jardines. Se trata de uno de los más visitados por sus características y desde luego, uno de los más recomendados.
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