El Castillo de Guimaraes

A la ciudad de Guimaraes se la conoce como la cuna de Portugal porque fue su primera capital y porque fue donde se dieron los primeros pasos para la creación de lo que fue luego el gran Reino de Portugal. Y el lugar que se considera donde se gestó todo es el Castillo de Guimaraes.

Para ver el Castillo de Guimaraes hay que salir del casco histórico de la ciudad, lugar declarado como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, y salir un poco de la misma en dirección norte. Allí, en un lugar conocido popularmente como el Campo de San Mamés, se alza esta construcción cuyos orígenes se remontan nada menos que al siglo X.

El primer castillo se eleva en esa época por orden de la condesa Muniadona, que quería proteger el Monasterio de San Mamés. Como la construcción era bastante pobre, de madera, el castillo se deterioró pronto pero el conde Enrique de Borgoña, padre del primer rey de Portugal, ordenó su reconstrucción en el siglo XI.

Diversas remodelaciones a lo largo de su historia le dan su aspecto actual. Una vetusta muralla de piedra coronada por hasta ocho torreones defensivos le dan forma al castillo. En el patio interior se eleva en su centro la Torre del Homenaje, en cuyas dependencias se cree que nació Alfonso Enríquez, más tarde Alfonso I El Conquistador.

Considerado como una de las maravillas de Portugal, es uno de los monumentos más visitados del país por el simbolismo que tiene. El acceso al patio es gratuito, pudiendo también recorrer las murallas libremente. También se puede entrar a la Torre del Homenaje pagando una pequeña entrada.

Web oficial | CM Guimaraes
Foto | Flickr – Stephen Colebourne

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