Lisboa invita a conocer sus museos: esencia lisboeta y ciencia para toda la familia
Lisboa ofrece muchos museos para que los visitantes conozcan más y mejor la esencia de la ciudad y el país, así que no se puede dejar de visitar sus propuestas.
El turismo de surf está de moda. Los aficionados a este deporte tienen a su disposición una gran cantidad de lugares donde poder disfrutar de su afición y alguno de ellos está mucho más cerca de lo que pensamos. Lisboa no suele estar en la mente cuando piensas en un lugar donde poder tomar olas de calidad y disfrutar de una experiencia intensa sobre la tabla, pero hay varios puntos cerca de la ciudad donde se puede vivir una experiencia intensa.
El oceáno Atlántico ofrece esos espacios donde se puede practicar el surf y Lisboa es uno de los puntos preferidos por los expertos en este deporte al que viajar, sobre todo en otoño. Las playas cercanas a la capital portuguesas acogen a miles de aficionados y profesionales del surf de todo el mundo, por la calidad de sus servicios y las condiciones del océano en esa zona.
La llegada del otoño hace que el número de visitantes se reduzca y la ciudad sea mucho más acogedora que durante los meses de verano. Además, la temperatura sigue siendo agradable, aunque no tenga los episodios tórridos del verano y las temperaturas todavía no son tan bajas como en invierno. En estos meses otoñales, la temperatura puede estar entre los 24 y los 28ºC, mientras que el agua se mantiene entre los 18 y 20ºC.
No importa el nivel de surf que se tenga, ya que hay una gran variedad de playas, cada una de ellas adecuadas para varios niveles de habilidad. Por ejemplo, la ciudad de Ericeira se encuentra a 40 minutos del centro de Lisboa y está considerada como Reserva Mundial de Surf desde el año 2011. Es la segunda reserva con mayor reconocimiento a nivel mundial y la primera de Europa.
Se puede practicar el surf en las playas comprendidas entre Empa y São Lourenço. En esta zona se concentran siete olas de clase mundial en un espacio que tiene una longitud de solo cuatro kilómetros.
También se puede practicar este deporte en la Costa da Caparica, situada al sur del río Tajo, a media hora del centro de Lisboa, pero también en Praia Grande y Praia das Maçãs, en Sintra.
Si nos desplazamos hasta Cascais, encontramos la Praia de Carcavelos y la Praia do Guincho. Esta se encuentra en el Parque Natural de Sintra-Cascais y se conoce por su terreno desafiante y la belleza natural del entorno.
Y, para potenciar la práctica del surf, hay muchas actividades relacionadas con el deporte que tienen como epicentro Lisboa. Miles de aficionados al surf se acercan hasta la ciudad para celebrar su afición y compartir olas. Hay festivales de música en la playa y competiciones de surf muy importantes a nivel mundial. Una cita ineludible para cualquiera que quiera disfrutar de la tabla en compañía de otros aficidonados.
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