Los 5 mejores templos para conocer en Tailandia
Tailandia, conocida como la “Tierra de las Sonrisas,” es también un país lleno de templos espectaculares que reflejan su rica historia, cultura y espiritualidad. Con más de 40,000 templos budistas repartidos por todo el país, elegir cuáles visitar puede ser un desafío. Aquí te presentamos una selección de los cinco templos más impresionantes de Tailandia que no te puedes perder.
El Wat Arun es uno de los templos más icónicos de Tailandia y un emblema de Bangkok. Se encuentra ubicado a orillas del río Chao Phraya, ideal para poder conocer la decoración con porcelana de su exterior, la cerámica y sus coloridos. Las vistas panorámicas del lugar son también interesantes para destacar, además de ser atractivo conocer durante el atarceder.
Ubicado dentro del Gran Palacio, el Wat Phra Kaew es el templo más sagrado de Tailandia. Tiene una ubicación perfecta en pleno centro histórico de Bangkok. Permite a los turistas conocer el Buda Esmeralda, que es una d elas grandes estatuas del país. Es ideal para poder hace runa visita completa y descubrir sus atractivos.
Famoso por su estatua gigante de un Buda reclinado, el templo Wat Pho también es conocido por ser el lugar de nacimiento del masaje tailandés tradicional. Es una gran figura de 46 metros de largo y además es ideal ya que es una zona donde la escuela de masaje tradicional de Tailandia es muy común, para que los viajeros se puedan relajar.
El Wat Rong Khun, conocido como el Templo Blanco, es una obra maestra contemporánea situada en Chiang Rai, Tailandia. Diseñado por el artista Chalermchai Kositpipat, su estructura completamente blanca simboliza la pureza del Buda. Detalles únicos, como esculturas surrealistas y espejos incrustados que reflejan la luz, crean una atmósfera mágica
Otra de las opciones es el Wat Doi Suthep, situado en la cima de una montaña, este templo ofrece una experiencia espiritual rodeada de naturaleza. En la zona podemos disfrutar de las mejores vistas, además de ver la escalera decorada con nagas o serpientes míticas, que es otro de los alicientes.
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